Satisfacción.
Día 2
“La felicidad consiste en el proceso de tomar con alegría lo que la vida nos da y soltar con la misma alegría lo que la vida nos quita. Cuando la vida nos da, surge la felicidad por algo, la de ganar, la que nos expande. Cuando la vida nos quita es la felicidad por nada, esa que expande la vida y a los demás, es una felicidad espiritual” San Agustín.
Nada es nuestro, todo es prestado. La vida nos permite su uso para experimentar y la utópica pretensión de mantener algo para siempre, es irreal.
La felicidad es un estado de serenidad sostenida en la que todas las emociones tienen cabida. Si la palabra felicidad parece algo alejada, aún, de tu esfera personal, sugiero que te acerques progresivamente a ella a través del término, satisfacción. Es algo que habitualmente hago y me resulta tremendamente gratificante sentirme satisfecha gran parte del tiempo.
Sentir satisfacción por lo que me expande y por lo que me contrae, por sentir ira, dolor o rabia y por sentir alegría, entusiasmo o interés; por lo que hago y por lo que dejo de hacer; por lo que siento y por lo que no me brota en el sentir. Esta opción, que como digo es personal, me parece similar a la felicidad o, aunque no tengo la certeza,… tal vez lo sea.
En cualquier caso, la felicidad o la satisfacción nacen de la propia persona, no de las cosas que la rodean. Para experimentarla, basta que vivamos desde dentro y dejemos de buscar fuera. Cuando somos capaces de darnos cuenta de eso tan simple, podemos dejar de depender de las circunstancias externas. No ocurre instantáneamente, claro, sino que sucede sutilmente.
Hazte consciente, hoy, de tu búsqueda de la felicidad. ¿Dónde la buscas? ¿Tiene que cumplir la vida tus idealizados deseos para que la encuentres? o tal vez puedes traerla hacia ti como si tiraras de la cuerda de un globo.
¿Qué está en sintonía con tu felicidad? ¿Comodidad, éxito, aprecio, abundancia, bienestar, facilidad, salud, amor, servicio, seguridad…? Tal vez puedes experimentarla, si te detienes a sentirla. Para, un instante. Dale espacio en tu consciencia.
Detente muchos instantes para crear una nueva conciencia.
Descubre qué sucede en ti.
Bello acercamiento a la felicidad a través de la satisfacción. Para mi siempre ha estado basada en la entrega y la relación de ayuda. Pero el cuidado no está de moda. Gracias. Hasta el acompañamiento del piano es hermoso . Viva la belleza.!!!!❤
Hola Yolanda.
El cuidado no es una moda, el cuidado nos ha traído desde las cavernas hasta aquí. Ocurre que cada sociedad tiene su manera y formas de cuidar. Somos fieles a nuestro sistema así que…se hace lo que se puede con lo que se sabe. Gracias por tu comentario.